No hay nada como poner una pegatina en la frente para conseguir la atención del grupo. Esta es otra de las cosas que aprendí con Cayetana Rodenas en yoga para niños y que he adaptado a mis clases de matemáticas.
Aunque esta actividad la he llevado a cabo para trabajar la divisibilidad, en realidad se puede adaptar a cualquier asignatura. De hecho, mi compañera de ciencias la aplicó para trabajar los planetas y el sistema solar.
La idea es la siguiente:
pongo en la frente de cada alumno (con los ojos cerrados) una pegatina con un número entre el 1 y el 100 (hay números repetidos y se lo digo para que no descarten opciones mirando los números de los demás). Cada alumno dispone de una tabla del 1 al 100 para ir tachando y debe ir haciendo preguntas para adivinar el número que tienen en la frente. ¡Ojo! Sólo valen preguntas de divisibilidad: “¿Es múltiplo de…?, ¿es divisor de..?, ¿es primo?, ¿es compuesto? Trabajamos la actividad en grupos de cuatro.
Les presenté esta actividad, que llevaríamos a cabo en la clase siguiente: un alumno salió a la pizarra a modo de ejemplo, le puse un número en la frente y empezó a hacerle preguntas al grupo entero. Luego salió otra alumna. Ya desde este momento a modo de presentación la actividad tuvo muy buena acogida y observé como el grupo al completo estaba atento al número y a si era adivinado.
La actividad tuvo muy buena acogida por parte del alumnado, que estuvo trabajando toda la hora con entusiasmo y atención plena y por tanto afianzando los conceptos de divisibilidad.